Tras un pequeño susto (2 horas de retraso en la salida del vuelo por problemas técnicos en el aeropuerto Londinense) logramos salir de Zaragoza… Este retraso hizo que se descuadrasen todos los planes… Llegamos a Stanted sin problemas y logramos coger (después de correr por todo el aeropuerto el autobús de las 16.00.
Pero ahí no acabó la cosa; el trayecto que se suponía tardaba unos 50 minutos fue de 2 horas y 15 minutos porque pillamos un atasco monumental en Londres.
Cosas del directo, que le vamos a hacer… Por fin llegamos a Victoria donde habíamos quedado con una amiga para verla y que nos diese unas entradas para un musical que le habíamos encargado. Y de paso aprovechamos la Travelcard con el logo de National Rail (necesaria para que sean efectivos los 2×1).
Tras el pequeño encuentro, nos fuimos al hotel a dejar las maletas. Muy cerca de la estación, 5 minutos andando y al lado de donde te deja el autobús de stanted.
El hotel, como he comentado correctísimo. Las habitaciones muy pequeñas y el baño es minúsculo (tipo al de un avión) pero si solo se va allí a dormir es más que suficiente, barato y muy bien ubicado; lo que si recomiendo es coger la habitación con ventana, porque además de ser un poco más grande, te da menos sensación de agobio.
Nos fuimos directos a Picadilly, donde habíamos quedado con un buen amigo mío que vive en Sevilla y coincidíamos ese día allí (que cosas ¡!).
Me llevé una buena impresión de Picadilly al llegar de noche y estar toda iluminada con neones, eso sí es mucho más pequeña de lo que pensaba. Pero es el centro neurálgico y eso se nota, una cantidad de gente impresionante, tiendas, tráfico, turistas de todo tipo, gente local…
Nos fuimos camino al SOHO a tomar unas pintas de cerveza mientras nos poníamos al día, y luego nos dirigimos a Leicester Square donde ya nos quedamos por la zona.
Tras la cena; y a pesar del frío nos fuimos paseando por Chinatown y de nuevo por el SOHO a tomar unas copas y empezar a descubrir lo caro que es Londres ¡!
Tras despedirnos de los amigos, y como no encontrábamos autobús de vuelta, decidimos ir andando al hotel (pensando que estaría más cerca); pero fue un precioso paseo pasando por Trafalgar Square, Downing Stree (alucinante ver el London Eye iluminado o el maravilloso Big Ben) la Abadía… (que lejos quedaba Victoria andando ¡!!); y que tarde era ya… como las 2 de la mañana, y al día siguiente había que madrugar ¡!
Muy buen sabor de boca del primer contacto con Londres…
Voy tomando nota Davo! Saludos y gracias por el relato.