A la vuelta de nuestra visita a Nikko, habíamos reservado esa tarde para visitar Akihabara en unas horas (o Akiba, como lo llaman por allí).

Antes de seguir; os diremos el por qué del título del post, y es que nuestros conocimientos de manga, anime, otaku, y videojuegos se limitan a Oliver y Benji, Dragon Ball y los caballeros del zodiaco… bueno y Totoro !!! así que poco os podemos dar a conocer de esa «parte friki» de Japón.

Una vez en el barrio, nos dedicamos a pasear tranquilamente mirando los escaparates y sobre todo admirando los neones.

Para nosotros el interés radicó en la multitud de tiendas de electrónica, cámaras fotográficas y accesorios varios, en los que pasamos un buen rato mirando, comparando precios…

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En estas tiendas, si se supera cierta cantidad podéis decir conseguir precios libres de tasas y ahorrar un poco en las compras. Nosotros no llegamos a comprar nada, porque íbamos en busca de una cámara de fotos pero al cambio los precios era muy similares a los de España o Amazon.

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Para los interesados en cámaras y accesorios de fotografía hay una tienda enorme que se llama Yodobashi Camera en el que encontraréis todo lo que imaginéis respecto a la fotografía.

Tengo que reconocer que si uno es amante del manga, anime etc. o de los videojuegos, este barrio será un paraíso; nosotros la verdad es que íbamos muy perdidos en ese tema.

Lo que sí nos llamó muchísimo la atención y donde quiero ahondar un poco más es la cantidad de Maid Cafes.

Los Maid Cafe son cafés en los que las camareras van vestidas de sirvientas  y te sirven como tal… Pues bien, a nosotros eso no nos gustó un pelo… evidentemente respetamos todo pero no lo vimos muy normal al menos a nuestros ojos.

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Además los hay a patadas y las chicas se ponen de reclamo en la calle para «captar» clientes… Lo que no nos gusta ni entendemos es esa obsesión por el gusto a que las chicas parezcan niñas. No queremos juzgar a nadie desde aquí, pero sabéis que siempre hablamos de lo que vemos, lo que nos gusta y lo que no. Y eso o nos gustó nada la verdad.

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Es cierto que en muchos sitios se ven chicas repartiendo publicidad para entrar a pubs, bares… ofreciendo descuentos en copas o chupitos… pero lo que nos llama la atención como os contamos es el hecho de que tengan que parecer adolescentes.

Me da la sensación además de que no supimos disfrutar más del barrio por lo que os comento, nuestra nula cultura en temas manga o anime.

Entramos en un pachinko y fue la locura total… solo pudimos estar poco más de un minuto dentro !!! que locura de luces, brillos, ruidos a un volumen estratosférico…

Seguimos nuestro paseo por el barrio encontrándonos con más chicas repartiendo la publicidad de los cafés. Incluso entramos en un sex shop enorme del que salimos pitando por lo que os digo… la manía de que las mujeres parezcan adolescentes…

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Por cierto, no confundáis a estas chicas de los Maid Café con algo relacionado con la prostitución. No queremos confundirlo con eso. Nada que ver. Estas chicas son camareras «disfrazadas» de sirvientas o de lolitas. Pero nada más que eso (o eso espero).

No podemos hablaros mucho más del barrio porque además de lo que os hemos contado poco más hicimos.

Con nota informativa, si vais en domingo la calle principal del barrio la cierran al tráfico desde las 13.00 a las 18.00.

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Después de tomar una especie de crep y un refresco y hacer alguna foto más nos fuimos de nuevo hacia Ikebukuro; la zona de nuestro hotel en esta segunda parte en Tokio.

Nota: repetimos de nuevo, que esto es una visión totalmente subjetiva y desde el desconocimiento de esta parte de la cultura japonesa.