Comenzamos nuestra particular ruta por el país nipón tras pasas unos días en Tokio (ciudad a la que volveríamos días después), y empezaríamos nuestra ruta poniendo rumbo a visitar Kanazawa.
Cogimos nuestro primer Shinkasen a las 7.26 minutos, y tras un cómodo viaje, llegamos puntualísimos a la estación de Kanazawa a las 9:51 de la mañana (estábamos alucinados con la comodidad de los trenes; esa amplitud de pasillos y asientos… pero sobre todo con la puntualidad).
Una vez fuera del tren nos recibió este amigo al llegar a la estación… Mira que son graciosos y tienen ocurrencias estos japoneses.
Uno de los símbolos; o mejor dicho, una de las fotos más conocidas de Kanazawa, es la puerta Tsuzumi (añadida en 1991) en el lado este de la estación además de la cúpula Motenashi; que le dan ese aspecto tan fácilmente reconocible.
Tras hacer las fotos de rigor; nos dirigimos a dejar el equipaje en el hotel; por cierto que en el post de hoteles en Japón, ya comentamos que el hotel de Kanazawa fue el mejor de todo el viaje (en cuanto a equipamiento, amplitud y comodidad).
Tras haber dejado las maletas, nos dirigimos a la primera visita del día: el Mercado Omi-Cho. Serían cerca de las 11 de la mañana así que como os podéis imaginar, el mercado tenía bastante movimiento; estuvimos paseando mirando los productos locales, haciendo fotos, y nos compramos las mejores cerezas (o cerezones) que hemos comido en nuestra vida.
Estaban increíblemente buenas; eso si, no fueron precisamente baratas, pero que nos quiten lo bailao. Estuvimos sentados tranquilamente comiendo las cerezas, mientras mirábamos el mapa y decidíamos hacia dónde ir.
Nuestra siguiente visita fue el Santuario Oyama; un santuario sintoista que se construyó en 1599 y que está dedicado al primer señor feudal del clan Maeda. Lo que nos encantó de este santuario, fueron sus jardines… donde ya pudimos comprobar como los trabajadores se afanan hierbecita a hierbecita para tenerlos perfectos.
Seguimos caminando hasta encontrar el antiguo distrito samurai Nagamachi, un barrio perfectamente conservado que te transporta a la època de los auténticos samurais; además de eso, vimos casas preciosas con jardines privados más bonitos aun.
Después de eso, fuimos a ver el barrio de geishas, Nishi Chaya. Bueno realmente una pequeña calle con casas de té y alguna tienda turística pero conservado y cuidado al detalle.
Era ya la hora de comer así que volvimos sobre nuestros pasos y nos fuimos a comer a la cadena Sukiya, donde comimos dos platos enormes de arroz carne (realmente grandes) por 960 yenes los dos platos.
Hacía bastante calor, y eso hace que el cansancio se note aun más, pero era temprano y nos quedaban aun varias visitas interesantes por realizar.
Una de ellas fue el Castillo de Kanazawa.
Construido en 1583 por el clan Maeda, ha sufrido varias reconstrucciones y modificaciones ya que se ha incendiado varias veces. Además de interesante, esta visita es gratuita y se puede ver alguna parte del interior del castillo; como las zonas desde donde se vigilaba al enemigo.
Entramos al castillo por la puerta Ishikawa y estuvimos paseando un rato por la zona, además no había mucha gente con lo cual, lo disfrutamos mucho más.
Desde allí, nos fuimos a visitar los Jardines Kenrokuen; de los que se dicen que son uno de los 3 jardines más bonitos de Japón (los Nihon Sanmeien; además de los de Kanazawa están los jardines Koraku-en en Okayama y Kairaku-en, en Mito).
Pagamos los 310 yenes de entrada, y estuvimos un buen rato de visita.
No sé si es de los 3 más bonitos, pero los jardines Kenroku-en son verdaderamente espectaculares; es la idea que uno tiene de esos jardines japoneses, tan llenos de paz, tan cuidados y tan especiales.
El nombre de estos jardines: Kenroku-en; significa jardín de las 6 características (características que tienen que tener los jardines japoneses: espacio, grandes vistas, serenidad…).
Estuvimos paseando un buen rato a pesar del calor, y haciendo decenas de fotos, además de sentándonos un rato a descansar disfrutando de las vistas.
Salimos de los jardines y fuimos a visitar el distrito de geishas Kazuemachi (declarado Patrimonio Histórico del país en 2008) y también Higashi Chaya, donde estuvimos paseando un buen rato admirando la buena conservación de las casas y lo bonito y cuidado que lo tienen todo.
Deciros que es muy complicado ver geishas por aquí, tengo entendido que los sábados se organiza un espectáculo de geishas (se puede pedir información en Turismo).
Estábamos bastante cansados así que nos fuimos a un bar que habíamos visto por la mañana antes de llegar al mercado; un sitio que os recomendados sin duda, se trata de Curio Coffee; un bar de un americano donde tomar un café, un té o un refresco, acompañado de algo dulce o salado, en el que además el dueño es una persona encantadora. Nos recomendó un sitio para cenar, que sin duda fue un acierto; nos llamó el para que nos reservasen sitio.
Antes de cenar, estuvimos paseando por la zona comercial de Kanazawa, echando un vistazo a alguna de las tiendas y haciendo alguna compra.
Fuimos a cenar al sitio que nos habían recomendado, se trata de Plat Home, un sitio digamos más bien de tapeo, muy pequeño pero sin duda acogedor. Estuvimos compartiendo charla con una madre y un hijo de San Francisco, compartiendo impresiones del viaje.
Cenamos 2 entrantes, un plato principal y dos cervezas (era obligatoria una bebida por persona) además de 2 aperitivos, por 4250 yenes. No es barato, pero estaba todo tan rico y disfrutamos tanto de la compañía, que el dinero estuvo bien pagado.
Después de cenar, fuimos a pasear de nuevo por los solitarios distritos de geishas y terminamos la noche en un bar, el bar Huni donde casualmente coincidimos de nuevo con los norteamericanos con los que compartimos cena, y terminamos la noche bebiendo chupitos de saque (creo recordar que 4 cada uno) por 2200 yenes en total.
Terminaba nuestro día en Kanazawa; un sitio que nos pareció perfecto para disfrutarlo paseando sin prisas. Para nosotros, un imprescindible de la ruta.
¡Por dios qué bonito lugar! Los jardines japoneses son impresionantes; transmiten tanta paz que dan ganas de quedarse a vivir allí. En nuestra lista de «pendientes en Japón» está sin duda Kanazawa.
Y qué bien la amabilidad de los nipones, siempre dispuestos a echarte una mano. ¡Nos encanta!
¡Un abrazo, chicos!
Muchas gracias chicos; os va a encantar, y sobre todo de noche que es tranquilísimo, y se queda como un lugar mágico; si volvéis, no dudéis en meterlo en la ruta.
Un abrazo !
Llegamos a Kanazawa a las 13,17, y tenemos dos noches allí, ¿sería suficiente una?, porque luego ya vamos a Tokyo y no tenemos muy claro si nos sobrará tiempo en Kanazawa podríamos aprovechar más en Tokyo, aunque allí tenemos 8 noches, y no sabemos si tomarlo como un descanso en medio del viaje o ir a saco y aprovechar más el tiempo. ¿Qué te parece?. Muchas gracias
Si llegáis a esa hora yo casi que me quedaría las dos noches y lo hacéis con calma. Date cuenta que entre que llegas al hotel etc serán las 3. Tienes la tarde y un día aprovechad para tomároslo con calma y ver más cosas en profundidad. Con 8 noches en tokyo tenéis mucho tiempo.
Un saludo
Muchas gracias David, me están viniendo de perlas tus relatos del viaje.
Saludos
Muchas gracias Maria José !